La media naranja Y la naranja completa

Esto que escribiré a continuación es una parte de algo que se está incubando desde hace unos días. Es como un escrito que cuenta el “proceso de”.

Lo curioso de este escrito es que es atemporal. El Ahora es algo que la mente humana no entiende, aunque se esfuerce y trate de que sea así. El Ahora tiene a todos los tiempos en sí mismo. No existe un pasado, luego un presente y finalmente un futuro; todo está aquí.

Las relaciones humanas en la actualidad se basan en la necesidad de llenarse con/del otro. En cada uno de nosotros existe la naranja incompleta, incluso es ‘romántico’ buscar a la media naranja. Nos la creemos esta m… de creencia. Es ‘romántico’ encontrar a alguien que te llene, si eres mujer es muy lindo encontrar a esa media naranja que te proteja, te ame y esté dispuesto a dar todo por ti y si eres hombre, es lindo encontrar a esa persona a la que le darás todo, la amarás, la protegerás.

Estoy cabreada, muy cabreada con la media naranja que hay en mí. No es mía, esa creencia que estoy incompleta no es mía, no me pertenece, pero ¡qué terquedad en aferrarme a ella!

Cuando soy la media naranja, salgo al mundo emanando eso y, obviamente, atraigo a otras personas incompletas, carentes, necesitadas que juegan a jueguitos de poder. Y yo como me creo mi carencia, juego con ellos.

No es malo, no es bueno. Puedo decir, ahora, que mi mente quiere convertir mis experiencias en negativas. Puedo darme cuenta de ello. Ya superé la etapa de creerme la víctima de las circunstancias. Ya no me la paso diciendo: “¿por qué a mí, por qué a mí?”. Lo que me asombra de todo esto es que Yo Soy responsable de todo lo que sucede en mi vida. Lo comprendo y me maravilla. Soy la artista que pinta lienzos. Yo, la creadora de mi destino.

No puede existir una cosa sin la otra, eso es imposible. Una vida sin nada de oscuridad fue un bonito cuento de hadas que nos contaron las religiones, las ideologías políticas, la gente… Yo soy luz Y oscuridad, soy la naranja incompleta Y soy todas las frutas conocidas y desconocidas.frutasfrutero13

“Esta información probablemente no es para ti, a menos que tomes plena responsabilidad por tu vida y tus creaciones” *. ¡Qué buena advertencia para leer una canalización! ¡Qué buen consejo para vivir una vida!

Aunque puede ser frustrante que sólo sea Yo la responsable de mis creaciones, de algunas, claro está, porque de otras estoy muy satisfecha. La humana quiere ser perfecta, pero no entiende que es perfecta en su imperfección.

Y me maravilla saber que soy yo, la creadora, Yo, nadie más. No hay un dios malhumorado que se ocupa de mi vida, sólo yo soy responsable de todo, absolutamente de todo, lo que sucede en mi vida.

Me encanta. Siento la pasión de mi alma, Kaikho**, es la palabra para este sentimiento.

Ir más allá del bien y del mal, lo estoy comprendiendo. Lo estoy comprendiendo. Siento a mi alma bailando, riendo. Comprendo la Alegría Eterna, y mientras escribo esto, la humana copista está anegada en lágrimas, sintiendo Kaikho.

Para qué esperar una semana más, ya se escribió lo que pensaba escribir para la siguiente entrada. Mientras escribía di el salto “del vacío a la abundancia…

* Desde hace unos años atrás Adamus dio esta advertencia, fue un momento clave para dejar de ser el estudiante del camino espiritual a ser el maestro. Un cambio de perspectiva muy significativo.

** Kaikho: El fuerte deseo interior y el anhelo por la vida. Está adentro de ti, una verdad interior, como un león rugiente, una profunda pasión que no desea otra cosa que no sea su propia realización. No es la codicia de la naturaleza humana o simplemente querer una vida mejor. Kaikho es querer la libertad absoluta o no vivir en lo más mínimo.